Ya en su 60 edición, el Festival de Eurovisión es uno de los eventos más vistos de Europa, con cientos de millones de televidentes en todo el continente. Este concurso de canciones lanzó en su momento las carreras de artistas como ABBA o Celine Dion. Incluso antes de proclamarse triunfante ganador en la edición de 2015, el cantante Måns Zelmerlöw ya era una estrella en su país natal, Suecia, con con una larga carrera de décadas que abarca discos, televisión y teatro. Desde que ganó Eurovisión, Zelmerlöw ha traspasado fronteras, girando por toda Europa y fuera del continente para promocionar su último disco, "Perfectly Damaged".  

Al frente de los equipos principal (FOH) y de monitores está Sebastian Meyer, de Meyer Production Sweden, con dos mezcladoras digitales Mackie DL32R controladas por iPad®.  Como comenta Meyer, la conexión en red de las dos mezcladoras a través de Dante ha sido una forma potente y efectiva de mezclar la banda de cinco componentes. 

"Estamos utilizando la totalidad de las 32 entradas para la banda y la totalidad las 32 salidas para crear mezclas estéreo para los monitores in-ear y para los monitores de cuña adicionales", empieza diciendo. "Conectando en red las mezcladoras mediante Dante, puedo utilizar una de las DL32R para la mezcla principal (FOH) y la otra para monitores. Todos quieren una mezcla diferente,  y esto me permite crear mezclas completamente diferentes para cada músico, con distinta ecualización, distinta dinámica y tantos efectos como necesite cada mezcla". 

Meyer utiliza la DL32R incluso para interconectarse con su computadora portátil, donde tiene una aplicación DAW externa. "Tengo algunos excelentes plug-ins de reverb de alta gama, y la DL32R me permite conectar mi DAW y utilizarla como un bucle de efectos. Es fantástico". Un disco duro conectado al segundo puerto USB captura una grabación multipista en cada concierto. 

El equipo de mezcla de Meyer se compone de dos iPad Mini colocados sobre una pequeña cuña. "Podría utilizar para todo un solo iPad o utilizar los dos para tener una pantalla mayor, pero me gusta tener un dispositivo diferente para cada una; de este modo, si alguien quiere hacer un ajuste rápido, lo tengo todo allí", puntualiza. Deja el iPad de mayor tamaño en el escenario porque es más cómodo, y da a cada uno de los cuatro músicos de acompañamiento un iPod Touch para que controlen sus propias mezclas de monitor individualizadas.  

"Muchos ingenieros con los que coincido en las giras ven mi configuración y me preguntan cómo puedo trabajar solo con una conexión Wifi", dice Meyer. "Llevo dos enrutadores y dos mezcladoras DL32R, y con la conexión Dante el sistema es completamente redundante. Si algo falla, tengo respaldo sin problemas. Hasta ahora, con más de 100 fechas, no hemos tenido ni un solo fallo ni problema". 

Meyer, que prácticamente creció detrás de un escenario porque su padre fue el fundador de la compañía de giras que ahora ambos dirigen, ha trabajado con toda clase de consolas de mezclas, analógicas y digitales, grandes y pequeñas. Para él, la DL32R representa una nueva forma de mezclar. "Es realmente fácil y rápida de utilizar. Con otras mezcladoras, configurarlas, moverse por ellas o realizar cambios es algo que lleva tiempo. Con la DL32R, me limito a llegar al concierto, configurarla y ya estamos listos para empezar".